Carolina Pérez Toledo preside desde 2015 la Asociación de Empresarias y Directivas (AED), una organización cuyo propósito es dar una mayor visibilidad a las mujeres empresarias y directivas de Bizkaia. Compagina este cargo con el de vicepresidenta de CEBEK, la Confederación Empresarial de Bizkaia. Además es Miembro de la Comisión Ejecutiva de INNOBASQUE, Vocal de la Cámara de Industria, Comercio y Navegación de Bilbao, forma parte del Comité Ejecutivo de Confebask y del Patronato de la Fundación Novia Salcedo.
Licenciada en Derecho por la Universidad del País Vasco, ejerció la abogacía hasta 1995. Al mismo tiempo creó su propia empresa, Bristol Idiomas, y Fortek Servicios de Formación. en el 2010 creó también la empresa Nauta Servicios Náuticos. En 2008 funda Learnlight en Bilbao, empresa de la que es socia y asesora estratégica del grupo. En esta ocasión charlamos con ella para conocer su punto de vista sobre el emprendimiento.
Pregunta. ¿Qué le llevo a lanzarse a emprender y crear empresas?
Respuesta. Soy Babyboomer, cuando entré en la Universidad éramos 600 alumnos por aula. Acabé mis estudios en 1988, en plena reconversión industrial con un paro del 30%. Abrirse camino en esos tiempos era muy difícil, así que decidí optar por el emprendimiento para crearme mi propio empleo. Siempre he intentado diversificar con el fin de minimizar riesgos, pero también por el placer de emprender y comprobar cómo un proyecto, una idea, se hace realidad y además del propio empleo, crea futuro para otras personas.
P. ¿Piensa que es necesario formarse en emprendimiento?
R. Es muy importante la formación; posiblemente me habría ahorrado más de un sufrimiento de haber tenido esos conocimientos cuando empecé. Además de la formación es importante disfrutar de algún tipo de mentorización, y poder compaginar ambas cosas a o largo de toda la carrera profesional, como un acompañamiento.
P. ¿La economía vasca necesita más personas emprendedoras?
R. Un sí rotundo. Estamos lastrados por una baja natalidad, un mayor estado de bienestar que a veces conlleva aversión al riesgo y una búsqueda de la seguridad laboral y económica. Todo ello conduce a que una gran parte de nuestros jóvenes deseen ser funcionarios. El emprendimiento debería de formar parte de nuestra educación; en la enseñanza secundaria podrían irse despertando vocaciones empresariales creando empresas ficticias y experimentando con las diferentes fases y vicisitudes. Con ello conseguiríamos además un mayor dominio de gestión financiera, de recursos y equipos… aptitudes útiles para la vida en general aunque no se emprenda. Como efecto secundario se lograría respetar más y mejorar la imagen de la empresa y de lo que significa ser empresaria o empresario.
P. ¿Cree importante dar a conocer el papel de las mujeres en el ámbito de la empresa para crear referentes en la sociedad?
R. Por supuesto, aunque sobre el papel la igualdad sea un hecho, los datos y la realidad nos demuestran una y otra vez que falta mucho tiempo aún para alcanzar una igualdad real en el mundo empresarial. Las puertas y las ventanas de las organizaciones y de las empresas se abren mejor desde dentro, es por ello que necesitamos en primer lugar mujeres que acepten los retos que se les presenten de alcanzar puestos de responsabilidad en las empresas y las organizaciones y, en segundo lugar, conseguir que estas mujeres que han llegado sean sirvan de referentes para el resto de la sociedad..
Pregunta. Usted se perfila como candidata en el relevo de Iñaki Garcinuño, actual presidente de CEBEK ¿Qué retos y desafíos afrontarán las empresas en la actual crisis Covid-19?
R. Es un momento muy difícil y delicado dominado por el factor que más daña la economía: la incertidumbre. El primer y principal reto que se plantea a las empresas es resistir, hacer uso de todas las ayudas públicas y recursos a su alcance para mantenerse viva y conservando todo el empleo que sea posible. Ayudar a mantener la salud, física y mental, de las personas de nuestros equipos es también básico. A la vez, cada empresa debe reflexionar internamente sobre los nuevos escenarios y oportunidades que se van a presentar en cuanto salgamos de ésta. Es cierto que la salida se está alargando más de lo esperado y deseado, pero no me cabe ninguna duda de que como en ocasiones anteriores, saldremos pronto de este enorme reto que la salud nos ha planteado.